jueves, 24 de septiembre de 2015

LOS CONFLICTOS


El conflicto es un desacuerdo entre individuos, en el que uno de ellos percibe una amenaza sobre cosas que considera importantes.  El conflicto no solo se encuentra en el campo de las relaciones más íntimas, sino que también puede darse entre personas sin ninguna relación y en cualquier situación.

A muchos niños les cuesta expresar verbalmente cómo se sienten, sobre todo durante una discusión, y por ello se frustran. Un niño puede responder de varias formas: enfadándose, dando patadas, gritando o tirando objetos e incluso agrediendo verbalmente o físicamente a alguien… para así expresar la angustia que siente. Sin embargo, si se le proporcionan las herramientas necesarias para desarrollar sus emociones estará más predispuesto y abierto y tendrá más ganas de resolver el conflicto de una manera eficaz.

Los conflictos son una realidad inevitable, que si no se tratan de manera apropiada pueden convertirse en problemáticos y potencialmente peligrosos. Por ello, hay que proporcionarles técnicas o estrategias necesarias para responder antes los momentos conflictivos y así controlarlos.


Los niños que se encuentran en una situación de confrontación pueden responder de maneras distintas. Aquellos que están habituados a ciertas estrategias o técnicas para resolver los conflictos estarán más capacitados para calmar un escenario potencialmente conflictivo y reconducir aquellas situaciones en las que surgen discrepancias.